Procrastinación. ¿Qué significa?
Tendencia a posponer el inicio o conclusión de cualquier tipo de acción o decisión indefinidamente teniendo uno intención de realizarla.
Características psicológicas de los procrastinadores
Suelen ser personas perfeccionistas con baja autoestima. El hecho de ser perfeccionistas implica no el hacer las tareas de manera perfecta sino la falsa creencia de querer tener resultados perfectos en poco tiempo. Por lo que los objetivos que se suelen poner estas personas son muy altos y exigentes en un periodo corto de tiempo. También son personas con baja tolerancia a la frustración. Es decir, que son poco resolutivas a la hora de encontrar soluciones cuando surgen problemas. Todo esto se refuerza al procrastinar ya que la sensación de fracaso aumenta y de no capacidad de hacer las cosas. Como consecuencia las inseguridades y la baja autoestima se refuerzan surgiendo nuevos sentimientos de culpa y frustración.
Los procrastinadores tienen una acusada tendencia a escoger la gratificación inmediata y a no valorar las consecuencias a largo plazo. También es una manera de evitar poner a prueba realmente la capacidad del individuo, preservando el autoconcepto negativo de uno mismo a la vez que se dispone de una “excusa” adecuada.
Tipos de procrastinadores. ¿Qué tipo de procrastinador eres?
- Tipo arousal: aquellas personas que disfrutan de la adrelanila que les genera, el hacer las cosas en el último momento.
- Tipo evitativo: son aquellos que no se enfrentan a la tarea en cuestión por la ansiedad que les genera. Ya sea por las expectativas catastrofistas o la poca motivación suscitada.
- Tipo decisional: posponen decisiones sobre un tema que les genera ansiedad o estrés. Las anteriores pueden contener este tipo también.
Consecuencias de la procrastinación
Las personas que procrastinan tienden a sufrir más estrés y a presentar una peor salud mental en general, además de realizar menos conductas de búsqueda de ayuda. Tienen sentimientos de culpa y suelen tender a compararse con sus semejantes. La queja suele ser muy recurrente y una procrastinación mantenida en el tiempo puede dar origen a síntomas de depresión y ansiedad.
En casos en los que la persona procrastina de cara al trabajo o a los estudios. Las personas pueden recurrir a las mentiras y a las excusas. Dando sensación de desconfianza a sus superiores o profesores y generando situaciones incómodas que la persona puede vivir con angustia.
Pautas para dejar de procrastinar
- Establece objetivos cortos y realistas sobre aquello a lo que te tienes que enfrentar.
- Pregúntate cuánto te motiva la tarea. La procrastinación correlaciona alto con la motivación. Encuentra valor a lo que estás haciendo.
- Sé consciente de que estás procrastinando para no enfrentarte a la tarea.
- Si quieres evitar hacer cosas que te generan esfuerzo, hazlo. Pero con consciencia y sabiendo que seguramente tenga consecuencias negativas.
- Haz un listado de todo aquello que te da miedo y empieza a enfrentarte por lo que menos ansiedad te genere.
- Piensa que la procrastinación es una manera de no vivir el presente. Por lo tanto intenta ponerte alarmas, mensajes positivos y recordatorios que te hagan traer tu mente al aquí y ahora.
Si necesitas ayuda, ¡búscala! No procrastines..
Vídeo interesante sobre la procrastinación del programa Redes: